Puerto Rico y los palestinos

Hoy domingo se llevó a cabo en el Viejo San Juan una marcha en protesta contra el ataque israelí a la población palestina de Gaza. Bastante gente concurrió a la marcha, y esto a pesar de las considerables presiones mediáticas extra-oficiales que pesan sobre los puertorriqueños para que acepten como buena la versión washingtoniana de los eventos globales. Es que en este caso es imposible cerrar los ojos ante el abuso insoportable al que el estado sionista somete a los palestinos. El gesto de hoy es poca cosa y, hasta tarde ha llegado visto que la mas campaña militar contra Gaza mas o menos ya ha amainado, pero al menos demuestra que hay algunos puertorriqueños que no viven permanentemente enajenados de lo sucede en el planeta. A continuación reproduzco algunos fragmentos de la hoja suelta que se repartió en la marcha:

La Franja de Gaza es un territorio sitiado altamente poblado en donde Israel mantiene encerrados a 1.6 millones de palestinos. Todo lo que entra o sale de Gaza es fiscalizado y controlado por Israel, debido al bloqueo económico y al control de las fronteras. Dicho bloqueo económico mantiene a la población en condiciones paupérrimas. Ya que prohíbe la entrada de alimentos, medicinas, combustible para generar electricidad y ayudas humanitarias internacionales de las cuales un 80% de la población depende para su supervivencia. Lo que ha convertido a Gaza en la cárcel mas grande del mundo. (énfasis mio)

Los medios de comunicación dicen que Israel simplemente se defiende de los ataques terroristas de los palestinos, la realidad es que hace décadas Israel ha ocupado el territorio palestino y ha ejecutado una política genocida con el propósito de expulsar a los palestinos y quedarse con los territorios.

Los palestinos llevan mucho tiempo sufriendo la violencia desproporcionada e njusta del sionismo, un proyecto de estado exclusivista y racista que hace de los árabes ciudadanos de segunda clase en su propia tierra. (énfasis mio)

Hay muchas cosas y causas (hoy en día la mayoría, francamente hablando) que transcienden las gastadas etiquetas de izquierda y derecha, progresista y conservador. El oponerse al genocidio palestino es una de esas causas. Es cosa de pura humanidad, de elemental decencia, defender el derecho de los palestinos a existir dignamente.